19 DE JULIO, DÍA DEL HÉROE CAÍDO EN COMBATE

Un día en honor de los héroes asesinados o mutilados con el innoble destino de ser considerados inservibles por la institución a la que entregaron sus vidas y que hoy comandan indigentes morales, ramerillas de medallas y preseas que carecen del honor de quienes dieron gloria a las Fuerzas Militares en otras épocas no muy lejanas y que hoy se abrazan sin pudor ni vergüenza con quienes siguen descuartizando, quemando vivos y desollando a nuestros hombres

19 de julio, día del Héroe caído en combate

Un día en honor de los héroes asesinados o mutilados con el innoble destino de ser considerados inservibles por la institución a la que entregaron sus vidas y que hoy comandan indigentes morales, ramerillas de medallas y preseas que carecen del honor de quienes dieron gloria a las Fuerzas Militares en otras épocas no muy lejanas y que hoy se abrazan sin pudor ni vergüenza con quienes siguen descuartizando, quemando vivos y desollando a nuestros hombres

Ricardo Puentes Melo
Ricardo Puentes Melo

Por Ricardo Puentes Melo

Julio 19 de 2015

Rodrigo Obregón luchó hasta lograr que el día 19 de julio fuera instituido como “el día del Héroe de la Nación y sus Familias”, y consiguió con la fundación que preside, Colombia Herida, que el Congreso aprobara la ley 913 que desde el año 2004 rinde homenaje a centenares y centenares de miembros de las Fuerzas Militares y de Policía caídos muertos o heridos en combate.

No podríamos decir que sea un día para celebrar. Es lamentable el abandono en que tienen a nuestros heridos, y el desamparo a que se enfrentan las familias de quienes ofrendan su vida en defensa de la patria.

Con un presidente que no está dudando en usar los cadáveres de soldados y policías como tarima de baile para invitar al terrorismo narcotraficante a continuar con el bacanal sangriento de asesinar a diario soldados y civiles, o volarles la cabeza con granadas o balas a policías inermes ante la complicidad de Juan Manuel Santos quien no duda en bautizar como “diálogos de paz” este ritual macabro de los asesinos, ciertamente este es un día triste para Colombia.

Un día triste que debería llamarnos a la reflexión e instarnos al agradecimiento hacia quienes escogieron como vocación de vida la defensa de la Patria, las leyes y las instituciones, que no es otra cosa que la defensa de los colombianos de bien para que la nación no caiga en manos de los asesinos internacionales que se escudan bajo la legalidad de lo que llaman “Partido Comunista” y que tristemente tienen entre las filas de las Fuerzas Militares algunos cuadros que preparan las cargas para implosionar la institución.

Conmemoramos este día con la reciente masacre de los 11 soldados del Cauca, a quienes se les había prohibido contestar el fuego de las FARC y a quienes se les negó el apoyo aéreo para combatir a los bandidos ocasionando ese saldo trágico para el país que celebraron en La Habana con sus mujerzuelas y whisky, y que ignoraron en la Casa de Nariño porque la vida de los militares valen poco menos que los tampones de la primera Dama.

Un militar llora la muerte de uno de sus hombres, mientras generales de la República se abrazan con los asesinos
Un militar llora la muerte de uno de sus hombres, mientras generales de la República se abrazan con los asesinos

Conmemoramos este día con varios militares muertos bajo la perversa modalidad de la desactivación de minas antipersona, una tarea que deberían hacer los terroristas desmovilizados, como prueba de su arrepentimiento, pero que Juan Manuel Santos y sus ministros Pinzón y Villegas prefirieron ponerla en manos de humildes soldados que se verán enfrentados a morir en ese intento y dejar a sus familias desamparadas, o a quedar horriblemente mutilados y ser considerados inservibles por la institución a la que entregaron sus vidas y que hoy comandan indigentes morales, ramerillas de medallas y preseas que carecen del honor de quienes dieron gloria a las Fuerzas Militares en otras épocas no muy lejanas y que hoy se abrazan sin pudor ni vergüenza con quienes siguen descuartizando, quemando vivos y desollando a nuestros héroes.

Héroes caídos también son aquellos que han sido apresados injustamente y que hoy cumplen condenas de por vida por el único hecho de cumplir con el deber sagrado de salvaguardar la institucionalidad y “defender la democracia, maestro”.

Para ellos, para nuestros Héroes caídos en combate, los apresados injustamente y sus familias, van mis oraciones y las de mis hijos, con la promesa de que no abandonaremos esta lucha que hoy nos tiene en el exilio.

Desde acá, ¡muchas gracias, héroes de la Patria..!

@ricardopuentesm

ricardopuentes@periodismosinfronteras.com

Comentarios

Loading Disqus Comments ...
Loading Facebook Comments ...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *