HOMOSEXUALISMO, UNA AGENDA GLOBALISTA. SU MAFIA EN COLOMBIA

Por Ricardo Puentes Melo
Octubre 10 de 2021
@ricardopuentesm
ricardopuentes@periodismosinfronteras.com

La promoción del homosexualismo no es un asunto pintoresco, como muchos creen, sino que es la piedra angular para la ruina de cualquier civilización, como así queda demostrado en los imperios que han existido. Para una nación habitada por principios cristianos, los globalistas saben que deben destruir los valores del cristianismo, que están claramente establecidos para el éxito de cualquier civilización, para ser reemplazados por otros con apariencia de bondad, amor universal y altruista, pero que no son nada más que la fachada para sembrar odio, destrucción y maldad que permitan el sometimiento definitivo de Occidente a los perversos globalistas que buscan esclavizar la humanidad en su soñado Nuevo Orden Mundial, con “un gobierno, una religión, una moneda”.

Durante años hemos vivido en un clima de “No se puede decir eso”. No se puede criticar la inmigración masiva porque eso es xenofobia. No se puede plantear preocupaciones sobre el Islam radical, eso es islamofobia. No se puede opinar contra la política del cambio climático, porque eso es el negacionismo del cambio climático, a la par del negacionismo del Holocausto, y cualquiera que se atreva a erizarse contra la eco-ortodoxia merece ser expulsado de la sociedad educada.

Y no se puede criticar el homosexualismo porque eso es homofobia.

Hay que dejar claro una cosa. La homosexualidad es parte del paganismo, es parte del propósito de Satanás para alejar a la humanidad de Dios y llevarla a la destrucción.

A lo largo de las Escrituras, esto es lo que se evidencia: Homosexualismo incorporado a la adoración de Satanás. Y esto se hace consistentemente cierto es las tradiciones ocultistas de siempre.

Muchos no se dan cuenta de que las dos, la sexualidad y la espiritualidad, están íntimamente relacionadas. De hecho, para comprender la espiritualidad pagana contemporánea, debe verse en el contexto de una cosmovisión completa, un paquete total que afecta a toda la vida.

La espiritualidad del hombre, creado por Dios, incluye necesariamente el sexo. El sexo con placer, pero sexo atado a la unión matrimonial entre un hombre y una mujer.

Por ello es que el satanismo y todas sus creaciones “materialistas” atacan la sexualidad diseñada en el plan divino y la denigran pervirtiéndola y “liberándola”. Depravar el arreglo de Dios sobre el sexo es la meta de Satanás y sus agentes en la tierra.

Lamentablemente, también, los líderes religiosos de la cristiandad torcieron las Escrituras y enseñaron que el placer no formaba parte del arreglo divino del sexo, y que la única razón de éste era solamente la procreación, desprovista del placer.

Por ello, tenemos dos visiones sobre la sexualidad en el ser humano: La de Dios y la de Lucifer, dos visiones que abarcan no solo el sexo sino todas las actividades del hombre y que se resumen en dos corrientes que, a partir del Renacimiento, se concretaron en las dos ideologías que gobiernan el mundo: el cristianismo y el Humanismo.

El aborto forma parte de la agenda globalista y tiene relación con los sacrificios humanos de la antigüedad

En las Escrituras, la homosexualidad junto con el sacrificio de niños figura entre las “abominaciones” practicadas por los pueblos que viven en la tierra que estaba a punto de ser conquistada por los israelitas. Notemos que Dios puso ambas categorías -la homosexualidad y sacrificio de niños- como algo moralmente detestable, en relación una cosa con la otra, y que quienes practicaran esto eran dignos de ser aniquilados.

Colombia no ha sido ajena a los intereses de la mafia globalista. Magistrados, jueces, periodistas, marxistas, artistas, ONG, dueños de medios de comunicación, empresarios y hasta líderes religiosos son fichas de esta agenda que está destruyendo los cimientos de la patria.

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