SE FUE AL TRASTE PLAN DE SANTOS
En secreto, el Presidente Santos esperaba abrir en diciembre esos diálogos de paz con lo que queda de las FARC tras la eliminación de su líder, Alfonso Cano
Santos tenía previsto rehabilitar a las FARC y allanar el camino para su reelección en 2014
Por Jacques Thomet
Un journalisme d’investigation, París
Traducido del francés por Colombian News
FARC: sus nuevos crímenes de lesa humanidad han hundido los planes del presidente Santos para rehabilitarlas y pavimentar así el camino para su reelección en 2014.
Para mantener sus prebendas, los políticos de todas las tendencias recurren a los artificios más retorcidos, a expensas del pueblo. Sucedió en Francia, con las maletas de potentados africanos a favor del clan Chirac-Villepin. Ahora es el caso de Colombia y de su presidente Santos. Para por lo menos mantenerse en el poder en 2014 y quizás para postularse después a la cabeza de la ONU, el turbio heredero de la oligarquía acaba de perder esa doble apuesta.
Sus dos planes, uno oficial con un proyecto para abrirle el panorama político a los terroristas que se rindan, y el otro, secreto, sobre unas conversaciones de paz con ellos, han volado en pedazos. La matanza de cuatro militares y policías rehenes que las FARC tenían en su poder desde hacía más de doce años, con una bala en la cabeza o en la espalda, explica ese traspiés. Oficialmente, cursaba en el Congreso un proyecto de ley de origen gubernamental que pretendía permitir la reinserción de los terroristas a la vida política si deponían las armas. En secreto, el Presidente Santos esperaba abrir en diciembre esos diálogos de paz con lo que queda de las FARC tras la eliminación de su líder, Alfonso Cano.
Esta revelación fue hecha por Fernando Londoño, ex ministro del Interior del presidente Álvaro Uribe, en su programa de radio “La Hora de la Verdad”. Los nuevos crímenes contra la humanidad de las FARC, con el asesinato el sábado de cuatro policías y militares rehenes, destruyeron las abyectas iniciativas. Poco después de que fuera conocida la noticia de ese acto bárbaro, el Congreso archivó el estudio de la rehabilitación política de los eventuales rebeldes arrepentidos. En cuanto al presidente Santos, su mítico proyecto de dialogar en diciembre con las FARC (pero con quien), para darse un gran pantallazo, se fue al agua.
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