¿PARA DÓNDE VAMOS?

A Santos se le olvidó que quienes lo elegimos fuimos nueve millones de colombianos que confiamos en él. Y, en ese momento, no éramos enfermos mentales

¿PARA DÓNDE VAMOS..?

Rafael Gómez Martínez

Por Rafael Gómez Martínez

Con  una gran desilusión, el Dr. Fernando Londoño Hoyos se pregunta en su programa La Hora de la Verdad, “¿para dónde vamos?”, con motivo del fallo de la CSJ y los computadores de RR. “Los colombianos de bien nos levantamos indignados por el fallo de la CSJ”, dijo.

Un comentario aparecido en la red social resume la rabia y la desilusión: “¿A quién le hizo el favor, la CSJ?”. Casi de inmediato, como si lo supieran, quienes se veían beneficiados por el fallo respondieron con agresividad. La tarea estaba hecha.

Si agregamos el intenso diálogo civilizado que se viene cocinando, sin Dioselina pero con Cano, quien no aparece, el panorama no pinta bien.

Comentó el senador Cristo, una vez aprobada la Ley de Víctimas, que “ustedes saben muy bien que yo no participé de la campaña electoral de JMS”. Gracias al senador Cristo, encontré la razón de mi desencanto.

A Santos se le olvidó que quienes lo elegimos fuimos nueve millones de colombianos que confiamos en él. Y, en ese momento, no éramos enfermos mentales.

Conservadores y uribistas, en su gran mayoría, que votamos a ojo cerrado por JMS. Un año después, Santos dio un giro en U, cambió las reglas del juego y, como bien comenta María Jimena Duzán, “quien se volteó fue JMS”.

Ante los hechos y las realidades que son tozudos, no nos quedará alternativa distinta a la disidencia. Porque, según Contraescape, JMS hará un gobierno liberal progresista. Para allá vamos, Dr. Londoño. Allende también fue progresista y, también, utilizó la razón y la fuerza.

 

¿Hacia allá iremos..?

Un año después el panorama no es nada alentador. “¿Cómo se encuentra el paciente, doctor?” “Crítico, pero estable”. Y uno se queda pensando: “Crítico, pero estable… ¿qué me quiso decir el doctor con eso?”.

Los síntomas del paciente son los siguientes:

El indolente sistema financiero apretando las tuercas. La cartera morosa comienza a crecer. El desempleo urbano subiendo. La economía informal superior a 50%. La imagen de JMS cayendo. La inflación ya cumplió la mitad de la meta. El Banco de la República decide castigar al consumidor subiendo los intereses.

Según el DANE, más de 3.000.000 de personas damnificadas por el invierno. Según Fedegan, más de 100.000 reses perdidas. Millones de hectáreas inundadas. De los 1.100 municipios, 990 destruidos o en mal estado.

A los habitantes de Gramalote los obligaron a pagar el impuesto predial. ¡Qué depresión! ¿Dónde estará la estatua de Laureano? La gente espera soluciones, no semántica.

Mis demás posturas con respecto a los nuevos mejores amigos, los temas de seguridad y las FF.MM. al cadalso, ustedes ya las conocen. Pero la más grave de todas: el silencio sospechoso y cómplice frente al Programa Nuclear venezolano. Caímos en la amnesia tranquila.

Pero, tranquilos, vamos muy bien.

Puntilla. Estoy de acuerdo con Contraescape: Perdimos a otro gran periodista. Cero y van dos. ¿Para dónde vamos?

Junio 07 de 2011

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